Este artículo analiza el rol de las TIC para promover el diálogo y la vivencia de una paz estable y duradera a propósito del Acuerdo de Paz en Colombia. Varias iniciativas han sido desarrolladas para motivar acciones de construcción de paz en los territorios, compartir el conocimiento, facilitar el diálogo entre diversos, difundir historias inspiradoras y ofrecer mejores oportunidades a las personas, a través de las TIC. El reto es usar las TIC para el seguimiento a la implementación del Acuerdo.
Las negociaciones de paz entre el gobierno colombiano y el grupo Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP) iniciaron oficialmente en noviembre de 2012 y finalizaron 4 años después. El 29 de agosto de 2016, inició el cese al fuego bilateral y definitivo, ese mismo día el Congreso de la República aprobó el texto del Acuerdo y el 2 de octubre de 2016 se realizó un plebiscito ciudadano para refrendar este documento. Aunque el No fue el ganador, los medios de comunicación divulgaron las estrategias cuestionables utilizadas por la campaña del No; al parecer la desinformación fue el arma más utilizada para persuadir a los votantes.1
Luego del plebiscito, el gobierno colombiano renegoció el Acuerdo con sectores del No; el nuevo Acuerdo fue ratificado por el Congreso de la República el 30 de noviembre de 2016. El 12 de diciembre la Corte Constitucional aprobó el Acto Legislativo para la Paz, creado con el fin de facilitar la implementación del Acuerdo. Desde fines del 2016 los excombatientes de las FARC se están moviendo hacia 26 zonas veredales transitorias de normalización donde las personas excombatientes dejarán las armas y se prepararán para su reincorporación a la vida civil. Las TIC en la construcción de paz A continuación se mencionan algunas experiencias de uso de TIC en la construcción de paz. Una de las iniciativas pioneras en el tema es el Tejido de Comunicación y Relaciones Externas para la Verdad y la Vida de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN)2. Liderado por los indígenas nasa, el Tejido articula de manera complementaria los medios como la radio, internet, impresos y video con formas de comunicación comunitaria como las asambleas, las mingas, los rituales, entre otras.
Otras experiencias son la Alianza Educación para la Construcción de Cultura de Paz3 y el Observatorio de Paz4. La Alianza se formó en 2002 y desde entonces ha compartido 300 experiencias en su portal web sobre temas como derechos humanos, resolución de conflictos, educación política, identidad cultural y creación de empleo. El Observatorio de Paz es una organización social creada en 1996 para promover el diálogo desde la paz a través de la educación, la investigación y la generación de conocimiento. Dos iniciativas más que usan las TIC para brindar capacitaciones a personas en zonas vulnerables y afectadas por el conflicto, son las Escuelas Digitales Campesinas de la Acción Cultural Popular (ACPO)5 y el proyecto JuvenTIC6.
Las Escuelas Digitales Campesinas (EDC)7 ofrecen oportunidades educativas a través de cursos en línea dirigidos a la población rural, promoviendo su inclusión social, cultural, digital y económica. JuvenTIC, coordinado por Colnodo con el apoyo de Google, busca contribuir al proceso de paz y a la inclusión social fortaleciendo las habilidades y conocimientos en TIC de personas jóvenes afectadas por el conflicto armado, quienes tienen escasas oportunidades educativas. La meta es que los jóvenes tengan más herramientas para competir en el mercado laboral, incrementar sus oportunidades laborales y ayudarles a fortalecer sus emprendimientos.8
La iniciativa ciudadana Forjando Paz9. busca contribuir a la construcción de paz promoviendo el conocimiento de los acuerdos a través de diversas herramientas pedagógicas y de comunicación. Una de ellas es Dejemos
de Matarnos10., que a través de videos ofrece unas explicaciones comprensibles y didácticas sobre el contexto del conflicto, la historia y el contenido del Acuerdo. La ONG Corporación Viva La Ciudadanía ha promovido la iniciativa Común Acuerdo11, que busca sensibilizar y promover el diálogo sobre el acuerdo, así como fomentar la participación ciudadana en su implementación. Esta iniciativa utiliza la etiqueta #Nomasviolencia.
Recursos para la conversación, la memoria, las voces Cada vez más, las TIC son usadas para promover discursos de odio y contenido violento vulnerando los derechos de las personas. En tiempos de paz, las TIC pueden contribuir a la construcción de diálogo, a la documentación y difusión de experiencias, a la educación de poblaciones y a combatir los mensajes discriminatorios. Un desafío es usar las TIC para recuperar la memoria histórica, hacer el duelo, reeditar el recuerdo para poco a poco ir sanando las heridas del conflicto; practicar la memoria como “… proceso abierto de reinterpretación del pasado que deshace y rehace sus nudos para que se ensayen de nuevos sucesos y comprensiones”.12 Las TIC pueden ayudar a que el olvido no haga perder de vista los hechos trágicos de la guerra y permita seguir construyendo y narrando las historias. Si en algo han ayudado las TIC, es para producir y difundir discursos que aunque no alcanzan a ser masivos y hacer contrapeso a los discursos hegemónicos de los medios masivos de comunicación. Permiten proponer posturas distintas, heterogéneas, no oficialistas, menos atravesadas por intereses políticos y económicos. Son voces que se salen del estándar comunicativo y discursivo de los medios tradicionales y tienen el potencial de generar opiniones más cualificadas.
Para hacer posible una cultura de paz, el reto es aprender a convivir entre conflictos locales, antagonismos entre posturas, diversidad de creencias y pensamientos, pero sin que esas diferencias se conviertan en razones para el odio, la persecusión y la violencia entre quienes piensan distinto. Las TIC pueden contribuir a ese diálogo más armónico, a lograr pactos de entendimiento y a evidenciar todas esas historias locales que son ejemplo de conversación, de consenso, de negociación y de convivencia. No es evitar la contradicción o el disenso, se trata de convocar maneras negociadas de solucionar los desacuerdos para que el conflicto sea una oportunidad de crecer y no un motivo para la división y la violencia.
(Traducción APC y ALAI).
Para leer la edición completa ir a Revista América Latina en Movimiento Nro. 521
Descarga el informe completo del Monitor mundial sobre la sociedad de la información (GISWatch) 2016 (en inglés) aquí
Referencias:
1 http://www.elespectador.com/noticias/politica/
2 www.nasaacin.org y http://www.nasaacin.org/sobre-nosotros2013/estructura-cxhab-wala-kiwe/54...
3 www.educacionparalapaz.org.co
5 La iniciativa ACPO es reconocida en estudios de la educación y la comunicación popular por sus escuelas en radioestaciones, las cuales operaron entre 1954 y 1978 en diferentes regiones de Colombia. Esta experiencia fue un modelo para muchas estaciones de radio en América Latina en programas de educación y desarrollo rural. Para más información visite:http://www.banrepcultural.org/radio-sutatenza
6 http://juventic.colnodo.apc.org/
7 http://cursos.mundorural.co/
8 JuvenTIC tiene participantes de municipios en los que el acuerdo de paz ha habilitado la reconciliación y el fortalecimiento del tejido social como Vigía del Fuerte y San Carlos (Antioquia), Carmen de Atrato (Chocó), Granada (Meta), Campoalegre (Huila), Toribio (Cauca) y Buenaventura (Valle), entre otros.
10 http://www.dejemosdematarnos.com
12 Richard, N. (1998). Residuos y metáforas: ensayos de crítica cultural sobre el Chile de la transición. Santiago: Editorial Cuarto Propio.