Era seguro que el tema iba a despertar el interés de muchos. Y así fue. Quien hubiese mirado hacia adentro del salón 113 de la Escuela de Administración de la Universidad Bolivariana de Venezuela en la noche de este miércoles 25 de enero hubiera visto un numeroso e interesado grupo integrado, en forma predominante, por jóvenes —activistas o estudiantes—. Todos muy curiosos para conocer más sobre este modelo de publicación de sitios personales sencillo y rápido, que permite a cualquiera actuar como cronista, reportero, comentarista, crítico u observador del mundo a su alrededor, expandiendo los límites de la participación ciudadana y de las movilizaciones populares.
El taller «Blogs por justicia social» fue conducido por la organización no-gubernamental británica Open Democracy (www.opendemocracy.net). Solana Larsen, ella misma editora del blog que la entidad publica sobre el Foro Social Mundial, hizo una exposición inicial sobre las principales herramientas para la creación, administración y difusión de blogs y, enseguida, buscó oír de los participantes sus experiencias y motivaciones sobre el tema.
Una de las preocupaciones más evidentes fue con la libertad de expresión, tras casos que se repiten en diversas partes del mundo de autoridades que intentan reprimir o callar a los blogueros. Larsen llegó a mencionar el caso de un bloguero iraní que tuvo su dirección bloqueada en su país. Para escapar a la represión, él compra un nuevo dominio a cada semana y usa el correo electrónico para mantener a sus lectores informados sobre dónde podrán encontrarlo.
Otro caso citado trajo el ejemplo de una historia personal usada como motivación social. Durante los primeros ataques de las tropas comandadas por los norteamericanos a Irak, una madre iraquí exponía su cotidiano doméstico en medio al caos de la guerra. El texto pasó a ser traducido al inglés y ganó la dimensión de mostrar al mundo la realidad que no se veía en los televisores, en los diarios y, sobre todo, en el discurso de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos y de las tropas aliadas.
«Hoy, por ejemplo, la ONG Reporteros Sin Fronteras ya reconoce a los blogueros como periodistas. Y hasta candidatos políticos hacen blogs porque saben que allí está la juventud. Y nosotros, de los movimientos sociales, necesitamos estar atentos a esto. Necesitamos caminar en la dirección de estas nuevas ideas y abrir otros frentes de comunicación y movilización», concluye Larsen.