Internet existe gracias al trabajo de muchas mujeres que han sido invisibilizadas, desplazadas de los espacios de poder y violentadas.
Diferentes organizaciones alrededor del mundo han intentado responder, resistir y cambiar esta realidad; de ellas hemos aprendido mucho y hace poco más de un año comenzamos a desarrollar una estrategia para sumarnos a la causa. Queremos construir una internet segura e incluyente en todos los niveles; queremos hacer otra internet.
Del movimiento feminista latinoamericano hemos aprendido que juntas somos más fuertes: podemos ayudarnos, apoyarnos, enseñarnos y responder. Como organización que defiende los derechos humanos y el interés público, nuestro trabajo consiste en promover y el fortalecer una comunidad de mujeres y feministas que trabajan en los distintos niveles del ecosistema digital en América Latina. ¿Cómo? Conociéndolas, promocionando su trabajo, mapeando sus esfuerzos y promoviendo el contacto entre ellas.
Políticas feministas cuidadosas de nuestra privacidad; mujeres enseñando y aprendiendo lenguajes de programación, geolocalizando datos abiertos, desarrollando aplicaciones para difundir información y acompañar a las víctimas de violencia doméstica, social o institucional. Organizaciones que desarrollan metodologías para divulgar y promover la adopción de prácticas seguras en el uso de internet; periodistas, editoras y narradoras trabajando en contar nuestra historia. Todas juntas construimos esta internet que soñamos y muchas de ellas están en nuestro informe de 2017, Latin America in a Glimpse: Gender, feminism and the internet, producido con el apoyo de un subsidio de APC.
Fuente de la imagen: Derechos Digitales