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Las tecnologías de la información y comunicación (TIC) están revolucionando el mundo en la misma proporción en que lo están contaminando. La sociedad civil viene denunciando este peligro desde hace tiempo y, recientemente, la ONU lanzó una nueva iniciativa como tímida respuesta. Participan, además de diferentes agencias, pesos pesados del hardware y el software mundial como Hewlett-Packard y Microsoft. ¿Se trata solamente de buenas intenciones? Más en este artículo que encara el tema desde la perspectiva de los países en desarrollo.


Varias agencias de la Organización de Naciones Unidas (ONU), socios y empresas de tecnología están creando un consorcio con el objetivo de extender la vida de los computadores y otros equipos electrónicos, reducir la contaminación y mejorar la recuperación de materiales, que se está convirtiendo en un problema grave en el mundo entero.


La iniciativa se llama “Resolver el problema de la basura electrónica” (StEP – Solving the E-Waste Problem) y se lanzó el 7 de marzo de 2007. La promesa es ayudar a quienes emprendan ese camino, aprovechando los componentes que se desechan pero “son cada vez más valiosos e indispensables”.


Los principales fabricantes de hardware y software – entre ellos, Hewlett-Packard, Microsoft, Dell, Ericsson, Philips y Cisco Systems – se unieron a la ONU, organismos de gobierno, la sociedad civil e instituciones académicas, junto con empresas de reciclado y rearmado de computadores, para formar parte de la iniciativa.


“Es clarísimo que hay que recuperar algunos componentes para evitar que los fabricantes se queden sin ellos; el precio del indio, por ejemplo – químico esencial para producir las pantallas planas de televisión y de los teléfonos celulares – empezó a dispararse por problemas de suministro”, explicaron los promotores de la iniciativa.


La basura electrónica es un problema creciente, sobre todo en el mundo en desarrollo, donde se está haciendo mundialmente visible el oscuro revés de las tecnologías de la información (TI) y la “economía del conocimiento”.


En esta nueva iniciativa con la basura electrónica (también conocida como e-basura), la coalición afirmó que sus objetivos principales son: estandarizar los procedimientos de reciclaje a nivel mundial a fin de recolectar los componentes valiosos, alargar la vida de los productos y los mercados para su reutilización, y generar políticas para el manejo de la basura electrónica.


Volúmenes crecientes


STeP asegura que hay “recursos valiosos en todos los productos desechados que tienen una batería o un enchufe” – computadores, televisores, radios, teléfonos fijos e inalámbricos, aparatos de MP3, sistemas de navegación, hornos microondas, cafeteras, tostadores, secadores de pelo, etc.


Cada vez se tiran más de esos artículos a la basura, según la coalición.


“Peor aún, los artículos que se envían caritativamente al mundo en desarrollo para ser reutilizados suelen quedar en desuso por varias razones, o los envían recicladores inescrupulosos para desecharlos ilegalmente. Y, muy a menudo, la basura electrónica se incinera en los países en desarrollo, lo que no solo es un gasto de recursos necesarios, sino que además agrega productos químicos tóxicos al ambiente local y mundial”, revela un informe publicado por el consorcio.


“Hay algo más que oro en esas montañas de basura de alta tecnología”, señaló Rüdiger Kühr, de la Universidad de Naciones Unidas, que albergará a la secretaría de StEP en Bonn, Alemania.


Los asociados declaran “estar comprometidos” a salvaguardar estos recursos cada vez más preciados y a impedir que contaminen el ambiente.


Impactos diferentes: el ejemplo de India


Este tema afecta a diversos países, de distintas maneras. Ya hace un tiempo que los informes de India indican que el problema de la basura electrónica es cada vez mayor.


Los estudios indican que cada año, sólo en Estados Unidos se desechan más de 30 millones de computadores y una “gran tajada” termina en India. No se presentaron cifras específicas.


Según el Convenio de Basilea, del cual India es signataria, es ilegal importar o exportar basura electrónica. Pero parece que ello no se ha implementado. El director de Toxic Link, Ravi Agrawal, acusó a la industria de una “apatía total” frente a la basura electrónica.


En febrero de 2007, Toxic Link analizó la producción de basura procedente de equipos eléctricos y electrónicos (WEEE – Waste from Electronic and Electrical Equipments) en la capital comercial y financiera de India,  Mumbai (Bombay).


La conclusión de este informe fue que Mumbai “no sólo es líder en generar basura electrónica para todo el país, sino que además desecha una buena parte en Delhi, y se están creando zonas donde el sector informal la procesa de maneras peligrosas para el ambiente”.


India sola genera unas 150.000 toneladas de basura procedente de equipos eléctricos y electrónicos por año. La mayoría va a parar al sector informal, ya que no existe ninguna iniciativa organizada por el momento, según el informe de Toxics Link.


“La verdadera cantidad de basura eléctrica y electrónica debe ser mucho mayor, ya que varios otros productos que no se usaron en el estudio se tiran al sistema de aguas servidas de la ciudad y porque no existen cifras sobre las importaciones de los países industrializados”, agrega el informe.


Cada año, la producción mundial de basura electrónica llenaría una fila de camiones de basura que se extendería por la mitad del planeta, lo que equivale a 40 millones de toneladas métricas. La Agencia Europea del Ambiente calcula que el volumen de basura electrónica aumenta tres veces más rápido que otros tipos de basura municipal.


Un libro publicado en 2004 por la ONU, “Los computadores y el ambiente”, reveló que el computador promedio de escritorio y su pantalla, que pesa unos 24 kilogramos, requiere en su proceso de fabricación un mínimo de diez veces su peso en combustibles fósiles y químicos.


Esta fabricación implica un consumo proporcional mucho mayor que lo requerido para hacer un automóvil o un refrigerador, que “sólo” exigen el doble de su peso en combustibles fósiles.


Manejo inadecuado


El reciclado de elementos de este tipo requiere procedimientos de alta tecnología. Según el estudio de la ONU, el manejo inadecuado de dichos materiales produce emisiones de tóxicos –dioxinas-, contaminación del suelo y el agua, y el desperdicio de recursos valiosos.


Los estudios muestran que las concentraciones crecientes de metales pesados en el cuerpo humano y en determinadas dosis pueden generar problemas en el sistema nervioso y también cáncer.


En varios países en desarrollo, cada vez son más las personas que viven del reciclaje y recuperación de la basura electrónica. Pero, en la mayoría de los casos, lo llevan a cabo usando “prácticas de patio trasero”, es decir que, a menudo, las circunstancias son muy precarias y los trabajadores/as quedan expuestos a graves problemas de salud.
 
Según los promotores de StEP, el principal objetivo de la organización es ofrecer una guía mundial para el desmantelamiento de la basura electrónica y maximizar la recuperación y el control de las sustancias que se recuperan.


Asimismo, está en marcha un proyecto a gran escala para ayudar a China a desmantelar y desechar su basura electrónica. Al maximizar la reutilización de recursos, se podrá cubrir la creciente demanda de China y de India, que necesitan materia prima cada vez más escasa .


Las fuerzas de trabajo conjuntas de StEP ayudarán a conformar políticas gubernamentales en todo el mundo y resolver los problemas relativos al rediseño y la expectativa de vida de un producto, la reutilización y el reciclaje, y a ofrecer la capacitación relevante en los países en desarrollo.


La necesidad de debate


Se podría discutir si dicho enfoque funcionaría, o simplemente le daría a los/as usuarios/as finales la confianza necesaria para seguir consumiendo con la creencia equivocada de que alguien se está haciendo cargo de la basura electrónica.


Hace poco, después del lanzamiento del nuevo sistema operativo de Microsoft, los defensores del software libre y el código abierto se pusieron a discutir sobre la posibilidad de que estas tecnologías empeoren más aún el problema de la basura electrónica. El nuevo sistema operativo requiere equipos mucho más poderosos para su funcionamiento, lo que implica que un alto número de computadores que funcionaban perfectamente hasta ahora se volverán obsoletos en poco tiempo.


Foto: EMPA, Suiza (derechos reservados): Reciclado informal de basura elecrónica en China
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Autor: —- (FN para APCNoticias)
Contacto: communications@apc.org
Fuente: APCNoticias
Fecha: 12/03/2007
Localidad: GOA, India
Categoría: Recursos para el desarrollo